Agentes de la división Comando Norte de la Policía de Oberá salieron franco de servicio y en lugar de regresar a sus hogares, decidieron ir a ayudar en la reconstrucción de la casa de una familia que lo perdió todo en un incendio.

El siniestro ocurrió el domingo cuando el fuego arrasó con la construcción de madera y techo de zinc, donde vivían Alejandro y Patricia, y sus dos hijos de 12 y 7 años. Pese a la pérdida material, no hubo que lamentar heridos, consignaron desde la fuerza de seguridad provincial.

“Por ello, la guardia de prevención del Comando tomó la decisión que al salir del servicio irían a darle una mano a esa familia de calle Balbín. Con herramientas en mano, los agentes instalaron pisos, ventanas, paredes y parte del techo para que los padres y sus hijos puedan instalarse lo antes posible en su nueva vivienda”, indicó el parte dado a conocer por el departamento Prensa.

“También llevaron prendas de vestir y víveres que fueron recolectados por el capellán policial de esa ciudad. Cabe destacar que la familia es asistida y contenida por el gabinete interdisciplinario para afrontar este difícil momento”, concluyó el parte oficial.