Se trata de un hombre de 50 años que por milagro no atropelló a dos policías en el control vehicular y que tras una cinematográfica persecución, despistó y fue capturado. Lo insólito del caso es que cuando descendió del vehículo, estaba completamente desnudo y con una adolescente, de 16 años, en el interior.

El terrible episodio se produjo este miércoles, alrededor de las 3, en una calle interna del barrio Docente, en la ciudad de Oberá. El conductor del rodado, marca Hyundai gris, de vidrios polarizados, circulaba a muy baja velocidad, circunstancia que llamó la atención de una patrulla del Comando Radioeléctrico que se encontraba en la zona.

Cuando los uniformados le hicieron señas para que detuviera su marcha, el automovilista aceleró y casi atropelló a los uniformados. Así comenzó una persecución de película hacia la ruta nacional 14, prosiguiendo por avenida Pincen y que culminó cuando el fugitivo intentó tomar una curva cerrada, a la altura del acceso a la calle Bragado.

Allí despistó, quedando el vehículo sospechoso sobre un montículo de tierra. Los policías rodearon el mismo y dieron la orden para que el conductor descendiera. Minutos después lo hizo, completamente desnudo y con la menor de edad en el asiento del acompañante.

En estas circunstancias, fue detenido y puesto a disposición del Juzgado de Instrucción 2 de Oberá. Ahora afronta cargos por los delitos de «corrupción de menores y abuso sexual».

«La menor fue contenida por el gabinete interdisciplinario policial y examinada por el médico. Luego, fue entregada en guarda y custodia a su abuela, quien realizó la denuncia correspondiente. Hay que mencionar que el vehículo fue secuestrado y la Policía Científica realizó las pericias de rigor», consignó el parte informativo de la Jefatura de Policía.